topbella

miércoles, 20 de marzo de 2013

Capítulo 9


Ness retiró el rostro de la cámara con la esperanza de que Zac no se diera cuenta. Contestó a varias preguntas de los periodistas, pero cuando éstas se volvieron íntimas, se escabulló, dejando que Zac gozara de ser el centro de atención. No todos los días se podía disfrutar de un triunfo semejante.

Mientras la prensa seguía sacando fotos, Ness se encaminó hacia su casa, pero la familia Efron la detuvo con sus felicitaciones y sus sonrisas. Estaba claro que no iba a poder evitar asistir al partido de fútbol con fines benéficos de por la tarde y, después, a la barbacoa en la playa.

Admitió que no quería pasar el resto del día sola, sino con Zac. Finalmente se fue a casa para ponerse ropa de mayor abrigo para la tarde y fue recibida como si fuera ya una vieja amiga en las gradas del campo de fútbol. Le gustó que esa gente fuera tan abierta con las relaciones personales, y odió la posibilidad de que se enteraran de que era una mentirosa. Se fijó en el número que llevaba Zac en la camiseta, para poder seguirlo durante todo el juego.

Ness gimió cuando Zac acabó en el suelo con un sonido sordo.

Ness: Eso le va a doler mañana -dijo, mientras Miley asentía sin parar de reír-.

Unos minutos más tarde, Zac volvió a ser alcanzado. Tardó más en levantarse del suelo que la primera vez. Ness se puso en pie, preocupada, hasta que lo vio enderezarse y dirigirse al banquillo. A los pocos minutos terminó el juego, con la victoria del equipo juvenil sobre los veteranos.

Zac subió a las gradas buscando a Ness. Ella se abrió paso entre la gente, sintiéndose más joven y excitada, a pesar de que ya tenía veinticuatro años. Sudoroso y lleno de barro, Zac se quitó el casco al verla. Sonrió.

Zac: No creo que tarde ni cinco segundos en caer agotado.

Ness: Lo disimulas espléndidamente.

Zac: Bien, te pasaré el brazo por los hombros e intentaremos que nadie se dé cuenta de que me estoy apoyando en ti porque no puedo tenerme en pie.

Ella rió y se alejó con él hacia el aparcamiento, despidiéndose de los Efron con la mano. Ness ya tenía la furgoneta reparada enfrente de su casa, pero había ido al campo de fútbol andando.

Zac se detuvo delante de un gran monovolumen y sacó las llaves.

Ness: ¿Qué ha pasado con tu deportivo plateado?

Zac: Lo vendí.

El monovolumen era enorme y de color cereza.

Ness: ¿Por qué? Pensaba que te gustaba.

Zac: Ya he superado esa fase de mi vida, supongo.

La verdad era que, desde que había conocido a Ness, él había empezado a pensar en el futuro Y... los coches deportivos resultaban muy poco prácticos. Por primera vez en tres años, tomaba en cuenta la posibilidad de casarse y formar una familia. Miró a Ness y no supo por qué tenía miedo de volver a sentirse herido.

Zac frunció el ceño mientras se quitaba el uniforme de deporte y se ponía una camiseta limpia.

Ness: Dios santo, Zac, tu mano... parece que la tienes rota -dijo examinando con delicadeza las heridas-. Necesitas un poco de hielo, acompáñame a casa.

Zac: La mía está más cerca y tengo que darme una ducha y cambiarme. Monta -ella dudó un momento-. ¿Tienes miedo de ir conmigo al volante?

Ness: Por supuesto que no. Pero conduciré yo. Esa mano no tiene muy buen aspecto.

Él le tendió las llaves con una sonrisa y se acomodó en el asiento del acompañante, dándole instrucciones para salir del aparcamiento. Ella condujo hasta su casa y él salió del coche gimiendo por causa de la herida, aunque se las arregló para limpiarse el barro de las botas en el felpudo antes de entrar.

Zac: Ponte cómoda, como si estuvieras en tu casa.

Ella echó un vistazo a las estancias salpicadas de escasos muebles. Parecía que nadie vivía allí. Sus miradas se cruzaron.

Ness: ¿Qué tal si preparo un poco de café?

Zac: Si queda... No he tenido tiempo de hacer la compra desde que empezó la feria -dijo emprendiendo la subida de las escaleras con aspecto cansado-.

Ness: Acuérdate de este momento cuando te vuelvan a proponer jugar contra los equipos juveniles, Efron.

Zac: Tu compasión es enternecedora, cariño.

Ness: Eso pretendo -dijo pensando si él realmente necesitaría su ayuda para subir a ducharse-.

Decidió que no y se puso a curiosear la casa. Le gustó el diseño arquitectónico, pero aborreció la decoración. No existía ningún detalle personal que diera sensación acogedora. La casa estaba desangelada y Ness comprendió que Zac pasara allí el menor tiempo posible. Puso el café en el fuego, encontró un par de tazas y oyó el sonido de la ducha en el piso de arriba.

Apoyada en la encimera de la cocina, Ness dio un sorbo de café, debatiéndose entre quedarse donde estaba o ir en su busca. Una voz interior la animaba, pero otra le advertía de que él estaría desnudo y mojado al lado de una cama. Los recuerdos de la noche anterior se agolpaban en su mente, llenos de imágenes y emociones. Se le disparó la imaginación y sintió dureza en los pezones y humedad entre los muslos. Se estaba enamorando de Zac Efron. Y tenía que contarle la verdad.

Pero no se atrevía a destrozar lo que estaba naciendo entre ellos con tanta fuerza. Con ese debate interno, se dirigió hacia las escaleras, portando las dos tazas de café y una bolsa de hielo. Con un profundo suspiro, empezó a subir los escalones y se sorprendió al ver que había cuatro dormitorios en la planta superior. Se orientó por el sonido de la ducha para dar con el suyo y abrir la puerta.

Una cama enorme dominaba el espacio, decorado con muebles de caoba y telas de gran calidad. Se los imaginó juntos, en aquella cama, con Zac encima de ella, a punto de penetrarla. Todo su cuerpo se vio recorrido por una intensa oleada de calor. Él había conseguido introducirse en su alma. Y ella supo inmediatamente lo que estaba haciendo. Había llegado el momento de dejar de huir... de la vida..., de Zac. Dejó las tazas y la bolsa de hielo y lo miró a través del cristal de la ducha. Él estaba apoyado con los brazos sobre la pared de gres y tenía la cabeza inclinada bajo el chorro de la ducha. Estudió con detenimiento cada centímetro de su cuerpo, sintiéndose maravillada. Él retiró la cabeza y sus miradas se cruzaron.

Ella sonrió mientras él cerraba los grifos, tomaba una toalla negra y se secaba brevemente la cara y las manos antes de arrollársela en torno a la cintura. Luego abrió la puerta.

Zac: Has subido hasta aquí por tu propia voluntad -dijo, luchando contra la urgencia de tomarla en brazos-.

Ness: Sí.

El mensaje estaba claro.

Zac: ¿Es necesario que te pregunte si estás segura?

Ness: No, no es necesario -dijo quitándose las gafas-. ¿Y tú?

Zac: Cariño -dijo dando un paso adelante-. No sabes cuántas veces he deseado que estuvieras aquí conmigo.

Ness se quitó los zapatos y las medias mientras Zac la observaba y se daba cuenta de que su cuerpo reaccionaba con prontitud. Cuando ella fue a quitarse el jersey, él se acercó, la atrapó entre sus brazos y la besó salvajemente. Metió las manos por debajo del jersey y notó la agradable calidez de su piel. Quería conocer a fondo todo su cuerpo, hacerla gritar de placer mientras veía cómo se estremecía entre sus brazos. Necesitaba todo eso como nunca había necesitado nada en la vida.

Siguió besándola hasta que ella se separó un poco y finalmente pudo quitarse el jersey. Zac la miró mientras ella se deshacía de los pantalones. Luego se soltó el cabello, creando una cascada de sedoso color ébano con reflejos de tono violeta oscuro. Ella lo dejó sin aliento, con la vista clavada en su delicada cintura y esos pechos rotundos que parecían querer escapar del sostén que los retenía. Cuando Ness se apoyó en la cama y se desabrochó el sujetador, él se quedó boquiabierto antes de lanzarse sobre ella para acariciarla y besarla con ferocidad. Se llenó las manos con sus dulces pechos y ella se las apretó. Después, él lamió y mordisqueó sus pezones, haciéndola estallar de placer.

Zac: Tienes un sabor maravilloso.

Ness: Es el gel de baño -bromeó pasándole las manos por todo el cuerpo-.

Él chasqueó la lengua, apartando una de sus rodillas para que el contacto entre sus cuerpos fuera más completo. Pero ansiaba que llegara el momento de penetrarla.

Ness: Creo que no necesitamos esto -dijo ella desanudando la toalla negra-.

Sus cuerpos ya estaban plenamente el uno junto al otro, con la erección de él presionando en el vientre de ella. Zac sintió que estaba a punto de perder el control y se separó un poco.

Ness: ¿Zac?

Zac: Espera un momento, preciosa, te deseo de tal manera que quiero prolongarlo lo más posible.

Ness: Siempre existe la posibilidad de repetir -dijo dándose la vuelta para agarrar la caja de condones, ofreciendo así una vista inmejorable de su trasero que dejó a Zac anonadado-.

Él tuvo que hacer un esfuerzo supremo para no introducirse en ella en ese mismo instante. Ella se estiró sobre la cama y él lanzó la boca entre sus muslos, chupando, succionando, mordisqueando... antes de recorrer todo su cuerpo hasta llegar a la garganta y volver de nuevo a descender hasta sus pechos.

Ella se apretó contra él, llena de calor y energía. Su contacto era como una tormenta desatada llena de truenos y relámpagos.

Ness gimió porque se sentía próxima al éxtasis, mientras lamía los planos pezones de Zac. Los dedos de él se introdujeron en el centro de su feminidad y ella soltó un breve sollozo antes de tomar la turgencia de él entre las manos.

Zac: Voy a perder el control, Ness.

Ness: Quiero verte roto en mil pedazos -repuso mientras daba un rotundo masaje a su miembro viril-.

Él cerró los ojos y su respiración tembló. Ella saboreó su lengua y se dejó lanzar sobre la cama, boca abajo, con las piernas abiertas. Él deseaba penetrarla sin dilación. Ella sonrió y levantó las caderas, invitándolo a introducirse en ella. Él tomó un condón y se lo colocó. Zac se estremeció cuando la punta de su miembro topó con la entrada de la suave vagina de ella. Ella estaba caliente y húmeda, esperándolo.

Ness se dio la vuelta y elevó aún más las caderas.

Ness: Ahora, Zac, por favor.

Él la penetró con una lentitud deliberada, sonriendo cuando ella suplicaba más. Finalmente se introdujo a fondo y Ness apretó la piernas para sentir mayor contacto.

Zac: Eres preciosa.

Ness: Los halagos te dan muy buen resultado.

Zac: Ahora mismo tengo todo lo que quiero tener.

Ness: Zac -dijo con los ojos bañados en lágrimas-

Zac: Tengo el corazón concentrado en esto.

Ness: Y yo también, guapo.

Él entró y salió varias veces y ella se acopló a un ritmo creciente que tenía otras connotaciones más allá del simple deseo. Formaban una pareja perfecta, totalmente compenetrada. Ness sintió cómo la conexión aumentaba de nivel y deseo que aquello no se acabara nunca. Experimentó una especie de agonía cuando él se retiró de repente, aunque volvió a ella al instante. Danzaron a ritmo acelerado, con la mirada clavada en los ojos del otro.

Y por fin llegó el momento, el placer que solo él era capaz de darle. La pasión por la que había esperado tanto tiempo.

Ness: Zac, Zac...

Zac: Lo sé, bonita, lo sé -susurró con voz ronca, mientras su propio éxtasis lo inundaba, como si una fuerza salvaje se liberara de pronto de su prisión-.

Ella apretó las piernas, deseando quedarse con todo su esperma, aunque era evidente que el condón lo impediría.

Una vez pasado el momento de éxtasis, ella se sintió débil y vulnerable. Pero él la besó lentamente y se echó sobre la cama llevándola consigo.

Ness miró sus profundos ojos azules y sonrió. Lo amaba. Era como si se hubiera abierto una puerta cerrada en secreto. No podía permitirse pensar en las mentiras que le había contado. Solo pensaba en el momento que estaba viviendo.

Zac: Ness.

Ness. Hum.

Zac: Eres increíble.

Ella se sonrojó y lo besó.

Él puso una mano sobre unos de sus pechos y lo estrujó.

Ness: ¿De nuevo a la carga?

Zac: Aún no hemos terminado. -Sonó el teléfono y lo miró durante unos segundos antes de responder-. Sí, madre, me encuentro bien. -Ness se tapó la boca para no soltar una risotada-. No, no está rota -prosiguió-. No, Ness está conmigo. Nos veremos esta noche en la barbacoa -dijo antes de colgar-.

Ness: No me puedo creer que le hayas dicho que yo estaba aquí -se quejó-.

Zac: No puede ver lo que estamos haciendo -dijo echándole los brazos por encima-. Y tú no puedes seguir ocultándote. Háblame de tu familia.

Ness: Ya lo hice.

Zac: Ya, sus nombres y nada más.

Ness: Ellos forman parte de mi vida, pero yo soy yo. Y lo que ahora quiero es que estemos tú y yo solos.

Zac: ¿De veras? -preguntó poniéndole una mano sobre la cadera-.

Ness: Nunca te quedas satisfecho con una sola vez, Efron. Eres adicto.

Ella se montó sobre sus caderas y condujo el miembro viril, otra vez erecto, hacia su vagina, dejándose poseer por su fuerza interior. Ella comenzó un movimiento de vaivén y él cerró los ojos, pensando en que solo deseaba a esa mujer.

Tuvieron que ducharse y vestirse y salir corriendo hacia la barbacoa en la playa antes de que su madre volviera a llamar de nuevo.

Ness: ¿Parezco culpable?

Zac: No -dijo pasándole un brazo por los hombros mientras se acercaban a la fogata de la playa-. Y yo tampoco -añadió besándola en la frente-. No me siento en absoluto culpable.

Ness: Pero llegamos tarde.

Zac: Yo necesitaba atención médica.

Ness: Y yo te necesitaba a ti. Ha sido maravilloso.

Zac: Todavía nos queda esta noche, cariño -dijo inclinando la cabeza hasta su oído-.

Ella sintió cómo un nuevo fuego ardía en su interior, tan espléndido como el de la playa, y pensó que despertar entre sus brazos a la mañana siguiente sería como un trofeo.

La familia y los amigos dieron la bienvenida a los vencedores de la regata con sonoras aclamaciones y Ness y Zac tuvieron que separarse, reclamados por las personas que querían saber más detalles sobre la regata. Durante las dos horas siguientes apenas si pudieron verse, pero Ness seguía con la mirada siempre que podía al hombre que acababa de hacer el amor con ella.

Apareció Miley, con una niña pequeña sobre la cadera. Ness le hizo una caricia.

Miley: Te gusta mi hermano, ¿no?

Ness: Sí, me gusta -dijo pensando que, en realidad, lo amaba-.

Miley: Me alegro. Ya iba siendo hora de que se echara una novia en serio -Ness frunció el ceño-. ¿No te ha hablado de su boda? Bueno, de una boda que no llegó a celebrarse jamás -Ness estaba helada-. Zac se dio cuenta de que ella solo iba detrás de su dinero y la canceló una semana antes.

Ness: Eso es espantoso.

Miley: ¿Lo quieres tú por su dinero?

Ness: Yo tengo dinero propio, Miley.

Tenía un fondo de inversiones a su nombre y una gran cantidad de acciones que la permitirían vivir con holgura durante unos años. Pero admiró a Miley por preocuparse por su hermano.

Zac: Desaparece, Miley -dijo apareciendo de repente-.

Miley: Solo me estoy preocupando por ti. Y, además, deberías habérselo contado.

Zac: Lo que pase entre Ness y yo es privado.

Miley: Te quiero, Zac -dijo en plena retirada-. Pero ahora que yo ya he desvelado el secreto...

Ness: Tu ex novia debe haberte hecho mucho daño.

Zac: En efecto.

Ness: Sin embargo, creo que puedo entenderla.

Zac: ¿Qué?

Ness: Ella quería casarse con un Efron, no contigo -explicó encogiéndose de hombros-. Estaba pensando en sí misma y labrándose un futuro seguro, pero te hizo daño en el proceso -miró a Zac y lo vio furioso-. No pretendo defenderla, créeme -añadió rápidamente-. Pero si estaba convencida de que las cosas materiales la harían feliz, el dinero sería su prioridad.

Zac lo pensó detenidamente y le dio la razón. Amber había sido la peor enemiga de sí misma.

Zac: ¿El hombre que te traicionó a ti también era así?

Ness: Muy parecido, solo buscaba su propio provecho. Me dijo que me amaba y era mentira. Buscaba algo.

Zac vio en los ojos de ella el dolor que aquella experiencia le había causado. Y también vio miedo. ¿Estaba preguntándose si él sería capaz de hacer lo mismo?

Zac: ¿Qué pretendía?

Ness: Hacer daño a mi familia -él enarcó una ceja-. ¿La amabas, Zac?

Zac: Estaba convencido de hacerlo, pero era fácil rendirse a sus encantos.

Ness: ¿Y lo has superado?

Zac: No te habría besado si no fuera así.

Ness: Ah, un hombre de honor.

Zac: Eres muy desconfiada, ¿lo sabías?

Ness: Forma parte de mi terapia diaria. Eso y las dos sonrisas por jornada.

Zac la abrazó.

Zac: He podido ver ese par de sonrisas esta misma tarde -dijo soltándole el cabello mientras ella volvía a sujetárselo rápidamente-. Eres preciosa, Ness. Deja de esconderte y ábrete a mí -añadió mirándola a los ojos. Sabía que había algo más en su pasado y se merecía saberlo-.

Ness: Zac, no sabes lo que me estás pidiendo.

Zac: ¿Tan malo es tu pasado?

Ness: No. Sí, es difícil de explicar.

Zac: ¿No has descubierto todavía que yo no pienso hacerte daño? ¿Qué yo no soy como él?

Ness: Yo tampoco soy como ella.

Zac: Eso ya lo sé.

Pues recuérdalo, recuérdalo.




¡Sí, Efron! ¡Más te vale recordarlo! Cuando te enteres de la verdad no será tu miembro el único que se quedará de piedra XD.

¡Eh! Guay el capi, ¿no? ¡Ya lo hicieron! Y no una vez, sino dos. Y todavía queda esa noche, no os digo más XD.

Claudix, bienvenida a mi club de lectura XD. Me alegro de que te gusten las novelas que publico aquí, pero te aclaro que son adaptadas, de ahí el nombre del blog XD, no son mías y, por lo tanto, no puedo hacerlas ni más largas ni más cortas XD. Bueno, recuerda eso: que ninguna de las noves que pongo aquí son mías. Porque no me gusta atribuirme ni que me atribuyan el mérito de otros.

Lau, no sabes lo que me río con tus comentarios XD. ¡A carcajadas, me río!
Sobre todo porque, así como comentas, parece que pones un comentario cada dos líneas que lees XD. En cada comentario me hablas de una cosa diferente del capi XD. Y otra cosa que me hace gracia es que, como escribes rápido, pones cosas como "chicha" en lugar de "chica" XD XD. Y también cuando me pones treinta veces "Publica". Te aburres mucho, ¿no? XD XD XD. Y tú tranqui que no me aburro de ti. Si me río un montón siempre. Bueno, una última cosita: si ya as publicado un comentario, cuenta siempre XD.

¡Mil gracias por los coments a todas!
Bye!
Kisses!


P.D.: ¡Dos capis y epílogo!


10 comentarios:

Unknown dijo...

WOOOOOOOW.

CUANDO ZAC SE ENTERARA? FALTA MUY POCO ME PARECE.
HA ESTADO DE MARAVILLAS EL CAPI!
ESPERO QUE SUBAS PRONTO :)

LaLii AleXaNDra dijo...

Wao, ya lo hicieron jaja
me ha encantado el capitulo, cada vez mas interesante, ya es hora que Nessa le adelante algo a Zac,
los dos merecen volver a confiar.
siguela pronto :)

Anónimo dijo...

Awwww! Me encanta me encanta me encanta!!!
Los dos estan enamorados y ya no se pueden separar el uno del otro!
Lo que mas me gusta es lo bien que se lleva ella con la familia Efron
Lovely!!!!!!

Anónimo dijo...

YO personalmente creo que Vanessa ya esta preparada para decir la verdad! Que se deje de rodeos y Hable ahora que Zac le esta dando la oportunidad!!!
Que se dejen de estar creyendo que el pasado forja el futuro! Del pasado se aprende pero no hay que dejar que nos llene de miedos!!

Anónimo dijo...

Y como no ponerte PUBLICA todo el tiempooo si eso es lo que quiero que hagas!
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA
Me fascinada la novela me muero por ver el capitulo del Baile y ahora cuando le diga la verdad!
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA
PUBLICA

Anónimo dijo...

Me encanto la parte en que Miley le preocupa, como toda buena hermana, si esta con el por el dinero y ella piensa algo como "Pff yo que voy a estar queriendo la plata de este si yo tengo la mia propia" XD
Publica lo mas pronto posible te lo imploro!

Anónimo dijo...

Me voy a poner como reto tratar de comentar de primera porque detesto comentar de ultima me siento como la que llega de ultimo a la fiesta y le toca saludar a todo el mundo XD
Que horror!!!
Jajajajajaja
Bye
Lau B.

Anónimo dijo...

Una ultima cosa! DEBO comentar sobre lo dulce que me parecio Ness durante el partido de football! Como se preocupaba cada vez que apaleaban a su pobre hombre!! Jajajajaja

Anónimo dijo...

Faltan 2 Capitulos y El Epilogo
Para que te deje de molestar… Tanto
Bueno no te prometo nada, todo depende de la siguiente novela!
De esta rescato hasta ahora la persistencia de Zac
Eso es exactamente lo que me hizo enamorarme de este Zac!
Ademas de ser buena persona ;)
Xx

Anónimo dijo...

Y ya para dejarte tranquila… mi pisca de violencia de este capi:
Lo que mas espero de toda la novela es que aparesca Drake Bell y Zac LE PEGUE UN BUEN PUÑETAZO POR MANCHAR EL NOMBRE DE VANESSA Y SU FAMILIA!!!
:P
Sending Much Love
Lau B.

Publicar un comentario

Perfil