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viernes, 9 de enero de 2015

Capítulo 6


Vanessa tuvo que ingeniárselas para encontrar mil maneras de entretener a su paciente, que estaba aburrido de pasarse el día en la cama. Los juegos de cartas pasaron pronto a la historia, así que hicieron juntos varios crucigramas e incluso se atrevieron con un juego de mesa que había en el cuarto de su hija.

La habitación estaba decorada en tonos rosas. En las estanterías había libros infantiles combinados con volúmenes de cómics, muñecas y un equipo de música con los CDS de los últimos éxitos juveniles. La poca ropa que había colgada en el armario iba desde ropa vaquera de diseño a pijamas con personajes de dibujos animados. Una niña a las puertas de la pubertad. Jessica Efron parecía estar atrapada en aquel espacio indefinido que separaba la infancia de la preadolescencia. ¿Cuánto habría en ellos de proceso natural y cuánto influiría el divorcio de sus padres? Will le había contado lo difícil que había resultado todo el proceso y los problemas que Zac tenía todavía con su ex mujer a causa de los niños. Vanessa se preguntó si Jessica sería consciente de lo mucho que sufría su padre por no poder verla todo lo que le gustaría. Pobre niña y pobre Zac. Estaba claro que la echaba muchísimo de menos, aunque no había ninguna razón para intentar apartar a los niños de su madre. Al menos eso era lo que Will le había contado.

Tras el juego de mesa, en el que Zac resultó vencedor, vieron una película en televisión. Él ya la había visto y pensó que a Vanessa le gustaría, lo que efectivamente sucedió. Seguían sentados en el estudio cuando apareció Will con algunos libros y otro paquete de té de hierbas.

Will: Estaba pensando en llevar a la enfermera Hudgens a cenar -aseguró el abogado con una sonrisa-. Tiene que estar agotada de cuidar todo el día de ti. Supongo que tendrá derecho a tiempo libre...

La expresión de Zac se ensombreció al instante y Vanessa supo lo que estaría pensando. ¿Quién cuidaría de él si ella salía? Si se quedaba a solas estaría indefenso.

Zac: ¿Y yo qué? -gruñó confirmando sus sospechas-. ¿Qué vas a hacer conmigo?, ¿encerrarme en un armario? ¿O tenías pensado en tirarme esta vez tú por las escaleras y así acabar conmigo?

Vanessa tragó saliva.

Ness: ¡Te empujaron!

Will y Zac intercambiaron una mirada de complicidad.

Zac: Yo no he dicho eso -aseguró aclarándose la garganta-.

Ness: Sí, sí lo has dicho.

Zac: Era una broma -dijo entonces sin mucha convicción-.

Vanessa se lo quedó mirando fijamente y trató de imaginarse quién podría odiarlo tanto como para empujarlo por las escaleras.

Ness: ¿Qué ocurrió?

Zac: No... no estoy seguro -mintió apartando la vista-. Lo cierto es que no lo recuerdo.

Ness: ¿Sabes quién fue?

Zac: Ya te he dicho que no recuerdo nada.

Will: Oh, vamos -intervino con expresión de desagrado-. Los dos sabemos que fue Amber.

Zac: Esa es tu teoría. ¿No crees que si tuviera la seguridad de lo que ocurrió aquella noche haría algo al respecto?

Will: Si eso significaría que Jessica tuviera que declarar contra su madre, no -señaló el abogado con suavidad-.

Zac apartó la mirada. Vanessa sintió que se le encogía el corazón. Pobre niña. ¿Habría visto cómo su madre empujaba a su padre por las escaleras? Si así fuera, Zac la estaría protegiendo de lo ocurrido con su silencio. Estaba claro que aquello era lo que Will pensaba.

Zac: ¿Has buscado ya al psicólogo que te pedí?

Will: Su pediatra ha accedido a firmar la recomendación, pero Amber se niega a colaborar -aseguró con un suspiro-. Tendremos que llevar el caso al juez.

Zac: Y mientras tanto, Jessica sufrirá -murmuró con amargura pasándose la mano por el cabello-. Si al menos yo pudiera hablar con ella tal vez pudiera ayudarla.

Will: Lo sé -aseguró el abogado-. Pero Amber la tiene escondida bajo tierra. Hoy llamé y me pasé por allí. Primero me dijo la doncella que habían salido a comprar el uniforme del colegio y luego la propia Amber me aseguró que Jessica estaba durmiendo la siesta.

Zac: Ya ves -gruñó-. La última vez que mi hija durmió la siesta tenía un año y medio. ¿Cómo voy a conseguir traerla aquí, Will?

Will: Espera hasta que se salten la próxima visita. Luego podremos reclamar al tribunal -aseguró con tono profesional-.

Zac: Pero ya se la han saltado.

Will: Estabas en el hospital -respondió el abogado levantando las manos con gesto de impotencia-. Amber podrá alegar que era demasiado traumático para los niños o para ti o para quien sea. Espera a que pase el fin de semana.

Zac: Y luego tendré que esperar al fallo del tribunal -añadió desesperado-. Ya sé cómo va esta farsa. Amber seguirá sin traerme a los niños durante semanas mientras avanza el papeleo y en el último momento cumplirá con lo pactado. Entonces su abogado señalará lo mucho que coopera y me hará parecer poco razonable y muy exigente.

Will: De acuerdo. Entonces tenemos otra opción, pero no te va a gustar -aseguró-. Puedo solicitarle al tribunal que acelere los trámites, ganarme su simpatía alegando que en tu estado necesitas la compañía de tus hijos con urgencia.

Zac: Vaya, eso es lo peor -respondió con una mueca-. Un hombre adulto utilizando a sus hijos para dar pena.

Will: No estás utilizando a tus hijos -señaló con calma-. Eso es algo que tú nunca harías. Los quieres. Eso está permitido en un tribunal, ¿sabes? Incluso está bien visto.

Zac: Lo que sea más rápido -se rindió suspirando con cansancio-.

Will: Veré lo que puedo hacer -aseguró el abogado. Luego se giró hacia Vanessa, sonrió y la señaló con el dedo-. Y nosotros, enfermera Vanessa, tenemos una cena pendiente.

Zac: Deja a mi enfermera en paz -intervino-. Y lárgate de aquí. Necesito descansar un poco.

Will: ¿Es siempre así de cariñoso? -le preguntó a Vanessa con buen humor-.

Ness: Y más -respondió con una sonrisa-.

Will: Hasta pronto, querida enfermera -se despidió guiñándole un ojo-. Si me necesitas, llámame.

Zac gruñó y ella soltó una carcajada.

Ness: Lo haré. Buenas noches. ¿Es siempre así de bromista? -le preguntó a Zac cuando Will se hubo marchado-.

Zac: Sí. Pero cuando ha dicho que quería cenar contigo no estaba de broma. Y eso me da envidia -aseguró con sinceridad y gesto sombrío-.

Ness: ¿Envidia? -repitió sin entender-.

Zac: Will es un hombre rico, de buena posición y completamente libre para hacer lo que quiera.

Ness: ¿Y tú no?

Zac: No, yo no -afirmó-. Por eso le envidio. Porque yo no podría salir contigo.

Vanessa sintió que el corazón se le aceleraba. Le latía el pulso con tanta fuerza que apenas podía respirar. Se colocó delante de la silla y se humedeció los labios.

Ness: Enseguida te pondrás bien y...

Zac: Sí, me pondré bien -la interrumpió apartando la vista-. Pero no seré libre. Esto no es una situación pasajera. Nunca me libraré de Amber. Al menos no del todo.

Nss: Pero... No lo entiendo. Estáis divorciados.

Zac: Legalmente sí -respondió girando bruscamente la cabeza para mirarla de frente-. Pero no nos engañemos: Amber nunca saldrá de mi vida.

Las esperanzas de Vanessa cayeron de golpe. ¿Amaba todavía a su ex esposa? ¿Estaría todavía enamorado de la mujer que lo había empujado por las escaleras? ¿Sería aquella la razón por la que no quería admitir que había sido ella?

Zac: Amber es... Bueno, emocional y mentalmente está... Muy necesitada. No sé cómo liberarme de eso. Quiero hacerlo, pero...

Ness: Pero es la madre de tus hijos -susurró-.

Zac: Sí, pero hay algo más. Cuando Amber te echa las garras, estás atrapado. Para toda la vida. Tanto si quieres como si no.

Vanessa suspiró. Sabía muy bien a qué se refería. ¿Cuántas veces había deseado ella dejar de ocuparse del egoísta e inmaduro de su hermano? Y sin embargo no dejaba de preguntarse dónde estaría, si estaría bien. Sí, entendía perfectamente lo que Zac quería decir. Se sentía atraído hacia ella pero amaba a su ex mujer y siempre la amaría por muy extraño que pudiera parecer, por mucho que no quisiera hacerlo.

Ness: Lo comprendo -dijo decidida a no mostrar su desilusión-. Gracias por contármelo. Ahora vete a la cama, ¿de acuerdo?

Zac suspiró y asintió con la cabeza. Ella regresó a sus tareas ocultando cuidadosamente la herida de su corazón.




Capi corto pero intenso, ¿no?

Amber que se confirma que es un mal bicho, Will que sigue en proceso de ligarse a Ness XD, y Zac con depre porque le van a quitar a la chica v.v

¡Thank you por los coments y las visitas!

Claudix, tú siempre estropeándome el final de las novelas XD Tú piensas que todo saldrá bien, pero, ¿y si resulta que al final Amber se carga a Zac y Ness se va con Will? Ahí te dejo con la duda XD

¡Comentad mucho y el próximo capi el domingo!

¡Un besi!


2 comentarios:

Maria jose dijo...

Muy corto!!!! Quiero mas!!!!
Vanessa se entero de la verdad, de como zac
Tuvo ese accidente, ya quiero seguir leyendo
Sube pronto
Me dejaste en duda, zac se puede quedar con amber?
muy emocionante la novela
Síguela pronto

Unknown dijo...

Jajaja, estoy segura que si al final no se quedaran juntos Zac y Ness no subirías la nove jajaja.. La verdad creo que lo importante en un novela es cómo se desenvuelve la historia, la mayoría terminan feliz *.* ... Pero también creo que ha sido obvio que me encanta la tragedia: si muere Ness y Zac se queda solo sufriendo o viceversa, yo encantada! :D :D :D :D jejeje.. Pero yo sé que saldrá bien! Jajaja sorry por arruinarte los finales xD!

Eeeeeeeeen fin, me da cólera que Vanessa piense que Zac sigue enamorado de Amber, en ningún momento entendí que eso dijo él en su confesión (¬_¬) .. Y me siguen dando penas sus hijos!!! TT.TT Pobres ellos y Zac :(

Me encanta la nove!!
Síguela pronto! :D

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